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7. Curación Cristiana: Espiritualidad U Oración Y Alabanza

LECCIO?N VII

1.- Mediante el uso de si?mbolos la, Biblia describe al hombre en su totalidad: Espi?ritu, alma y cuerpo. Los si?mbolos utilizados son hombres, lugares, pabellones, templos, y asi? sucesivamente. El nombre de cada persona mencionada en la Biblia tiene un significado, que representa el cara?cter de esa persona. Los doce hijos de Jacob, representan las doce facultades fundamentales del hombre. El nombre de cada uno de esos hijos, correctamente interpretado, nos informa el desarrollo y la funcio?n de cada facultad en particular, en su asociacio?n trina, esto es, su relacio?n con la conciencia en Espi?ritu, en alma y en cuerpo. Por ejemplo, cuando nacieron los hijos de Jacob, sus madres revelaron el cara?cter de la facultad que cada cual representaba. Esto esta? expu?cado en los capi?tulos 29 y 30 del Ge?nesis.

2.- Esta? escrito acerca del nacimiento de Rube?n: "Concibio? Lea, y dio a luz un hijo, y llamo? su nombre Rube?n, porque dijo: Ha mirado Jehova? mi afliccio?n". El e?nfasis esta? en la palabra "mirado" y, buscando en la concordancia encontraremos que el significado de la palabra "Rube?n" es "uno que ve; visio?n del hijo". Esta? claro que esto se refiere a la manifestacio?n de la vista.

3.- "Concibio? otra vez, y dio a luz un hijo, y dijo: Por cuanto oyo? Jehova? que yo era menospreciada". Aqui? el e?nfasis esta? en la palabra "oyo?", y encontramos que Simeo?n significa: "Aque?l que oye u obedece, aque?l es oi?do". Esta es la manifestacio?n de la audicio?n.

4.- "Y concibio? otra vez y dio a luz un hijo, y dijo: Ahora esta vez se unira? mi marido conmigo". En este caso, el e?nfasis esta? en la palabra "unira?". Levi? significa "unidad", que en el cuerpo es sensibilidad; en el alma, simpati?a; y en el Espi?ritu, amor. Por tanto, cada una de las doce facultades funciona, en el hombre completo, en este grado triple.

5.- Lo que aqui? se describe como el nacimiento de los doce hijos de Jacob es la primera o natural manifestacio?n de las facultades. Una ma?s alta expresio?n de las facultades, se simboliza en los doce apo?stoles de Jesucristo. Simo?n Pedro es la audicio?n y la fe unidas. Juan es el sentimiento y el amor unidos. Cuando creemos lo que oi?mos, se forma en nosotros la substancia de la palabra, que es Pedro, una roca una base segura."

6.- La Biblia es un libro maravilloso, que se va revelando al hombre a medida que e?ste desarrolla su comprensio?n espiritual, y entonces el hombre ve por que? ese libro ha sido reverenciado y llamado sagrado por la gente. Contiene un ana?lisis profundo de las leyes mentales y constituye un tratado de los verdaderos estados fisiolo?gicos del cuerpo. Ensen?a que el organismo humano es mente en accio?n ma?s que un agregado en funciones puramente materiales. Pero sobre todo, la Biblia explica el cara?cter espiritual del hombre y las leyes que gobiernan su relacio?n con Dios. Estas se exponen simbo?licamente, como estados de conciencia, ilustrados con para?bolas y alegori?as. Dice Pablo, refirie?ndose a la historia de Sara y Abraham: "Cuyas cosas contienen una alegori?a". Se escribe de Jesu?s: "Y sin para?bolas no les hablaba; para que se cumpliese lo dicho por el profeta, cuando dijo: Abrire? en para?bolas mi boca; declarare? cosas escondidas desde la fundacio?n del mundo". Jesu?s mismo era una para?bola. Su vida fue una alegori?a de las experiencias por las que el hombre pasa, al desarrollarse de la conciencia natural a la espiritual; de aqui? que la Biblia y los profetas so?lo puedan ser entendidos por aque?llos que han llegado al lugar en conciencia en que se encontraban los escritores cuando divulgaron sus mensajes. El leer las Escrituras y entenderlas, requiere la misma inspiracio?n que se requirio? originalmente para recibirlas y escribirlas.

7.- En el capi?tulo 29 del Ge?nesis leemos de Lea, la esposa de Jacob: "Y concibio? otra vez, y dio a luz un hijo, y dijo: Esta vez alabare? a Jehova?; por esto llamo? su nombre Juda?". El significado, en hebreo, de la palabra "Juda?" es "alabanza". En Espi?ritu, la alabanza o la oracio?n, la facultad de Juda?, acumula ideas. En la conciencia de los sentidos esta facultad se llama adquisividad; ella acumula cosas materiales y cuando el ser es dominante, "tiene un demonio". Este es Judas.

8.- Cada una de las doce faculades tiene un centro y un lugar definido de expresio?n en el cuerpo. La fisiologi?a ha designado estas ubicaciones de las facultades con el nombre de centros cerebrales y nerviosos. La percepcio?n espiritual revela que son agregados de ideas, pensamientos y palabras. Los pensamientos hacen ce?lulas, y los pensamientos de la misma i?ndole se atraen mutuamente en el cuerpo, por la misma ley que atrae a las personas de ideas afines a asambleas y comunidades. El hombre intelectual se centra en la cabeza; el hombre afectivo vive en el corazo?n; el hombre sensual se expresa a trave?s del abdomen. Las actividades de las regiones indicadas se subdividen en multitud de funciones, todas las cuales son necesarias para reconstruir el hombre manifestado tal y como ha sido idealizado en la Mente Divina.

9.- En el mismo a?pice del cerebro esta? el centro ganglionar, el que podemos llamar trono de reverencia o espiritualidad. Es aqui? donde el hombre sostiene conversaciones con el conocimiento en la Mente Divina. Este centro es el lugar o "recinto alto" de la conciencia espiritual, y se designa en las Escrituras con el nombre de Juda?. Su funcio?n es orar y alabar. La facultad de Juda? abre el portal de ese misterioso reino llamado el superconsciente, donde el pensamiento se impregna de una cualidad levantadora y transcendente. Todo excelso ideal, toda la inspiracio?n que se eleva e idealiza en religio?n, poesi?a y arte, se origina aqui?. Es el reino de lo verdadero y lo real en todas las cosas.

10.- La importancia de Juda? se indica por su lugar en la familia de Jacob y Lea. Jacob (el suplantador) se comprometio? con Raquel (oveja). En el momento de los esponsales el padre de Raquel substituyo? a la prometida por su hija mayor, Lea. Lea significa "Hastiada". El primer hijo de Lea fue' "visio?n"; el hasti?o vio la luz del Espi?ritu. El segundo fue "audicio?n"; ella pudo recibir la palabra. El tercer hijo fue "unio?n"; ella se fundio? con lo ilimitado. El cuarto hijo fue "alabanza". Despue?s del nacimiento de Juda?, Lea "dejo? de dar a luz". La alabanza es el complemento de la visio?n, la audicio?n y la unidad. Es la redencio?n del hasti?o, y de ella procede el Mesi?as, el U?nico ungido, el Salvador del mundo. La oracio?n deberi?a ser una accio?n de gracias jubilosa, en vez de una su?plica. Este me?todo de oracio?n aviva la mente milagrosamente, y, como un poderoso ima?n, atrae hacia afuera las cualidades espirituales que transforman a todo el hombre cuando se les da expresio?n en la mente, el cuerpo y los asuntos.

11.- La espiritualidad es una de las facultades fundamentales de la mente. Es la conciencia que relaciona al hombre directamente con el Padre-Mente. Se aviva y se aumenta a trave?s de la oracio?n y a trave?s de otras formas de pensamiento religioso y de adoracio?n. Cuando oramos, miramos hacia arriba desde adentro, no porque Dios este? afuera, en el cielo, sino porque este centro espiritual en el tope de la cabeza se activa, y nuestra atencio?n es atrai?da hacia e?l naturalmente.

12.- La oracio?n es natural al hombre, y deberi?a cultivarse para redondear su cara?cter. La oracio?n es el lenguaje de la espiritualidad; cuando se desarrolla, hace al hombre sen?or en el reino de las ideas creativas. Para obtener resultados del uso de esta facultad, se debe pensar correctamente, tanto aqui? como en otra parte. El orar, creyendo que la oracio?n va a ser contestada o no, dependiendo de la voluntad de Dios, es ignorar la realidad. Es una ley de la mente que cada idea se logra tan pronto es concebida. Esta ley aplica al reino espiritual. "Todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibire?is, y os vendra?". A la luz de nuestro conocimiento de la accio?n mental, la ley que se expresa en estas palabras, es clara. Ma?s au?n, la fe impli?cita en ellas, es absolutamente necesaria para la respuesta segura a la oracio?n. Si oramos pidiendo una realizacio?n en el futuro, formamos en la conciencia esa clase de estructura pensante, y nuestras oraciones e s t a? n siempre esperando por aquella futura realizacio?n que habi?amos idealizado. Si oramos pensando que no merecemos aquello que estamos pidiendo, estos falsos e indefinidos pensamientos se realizan, y crecemos mirando a la oracio?n con dudas y recelo. A esto se le llama la oracio?n de fe ciega, pero no era e?sta la clase que Jesu?s uso?, porque Sus oraciones eran contestadas.

13.- No debe inferirse que la voluntad de la Mente Divina debe mantenerse apartada en la oracio?n; debemos orar para que la voluntad de Dios entre dentro de nosotros y se vuelva un factor determinante en nuestra vida. "No se haga mi voluntad, sino la tuya", oro? Jesu?s. El padre no nos quita nuestra voluntad; ma?s bien, El nos da la ma?s completa libertad para el uso de la facultad de voluntad, y El tambie?n imparte una comprensio?n de la ley, a trave?s de cuya operacio?n podemos hacer surgir cualquier condicio?n que deseemos. "Todo lo que pidiereis en mi nombre, lo hare?", se vuelve nuestra seguridad.

14.- Una de las funciones de la espiritualidad es agregar ideas divinas. A trave?s de esta accio?n el hombre extrae de la Mente universal, ideas absolutamente verdaderas. Por tanto, la oracio?n es acumulativa. Acumula substancia espiritual, vida, inteligencia; acumula todo lo necesario para la ma?s alta expresio?n del hombre. Cuando oramos con comprensio?n espiritual, este elevado reino de la mente del hombre, se pone en contacto con la Mente universal e impersonal; la misma mente de Dios se une a la mente del hombre. Dios responde a nuestras oraciones en forma de ideas, pensamientos, palabras; e?stas se trasladan a los reinos exteriores, en tiempo y situacio?n. Es por tanto importante que oremos con comprensio?n de la ley, y que siempre demos gracias porque nuestras oraciones han sido contestadas y realizadas, no importa cua?les sean las apariencias. Cuando Jesu?s multiplico? los panes y los peces, El oro?, los bendijo y dio gracias. Con comprensio?n y entendimiento de la relacio?n entre la idea y el logro de la misma, El avivo? el lento proceso de la naturaleza, y los panes y peces se multiplicaron ra?pidamente. Es posible que nosotros no podamos lograr de momento tan ra?pida operacio?n de la ley, pero podemos aproximarnos, y aceleraremos el proceso natural, si mantenemos nuestras ideas ma?s cerca de la perfeccio?n del reino de las ideas divinas.

15.- La alabanza esta? i?ntimamente relacionada con la oracio?n; es una de las avenidas a trave?s de la cual la espiritualidad se expresa. Debido a una ley inherente a la mente, aumentamos aquello que alabamos. Toda la creacio?n responde a la alabanza, y esta? gozosa. Los entrenadores de animales los acarician y recompensan con golosinas por actos de obediencia; los nin?os resplandecen de gozo y alegri?a cuando son alabados. Hasta la vegetacio?n crece mejor en manos de quienes la alaban. Podemos alabar nuestras propias habilidades, y nuestras ce?lulas cerebrales se expandera?n y aumentara?n su capacidad e inteligencia, cuando pronunciemos palabras de esti?mulo y aprecio con relacio?n a ellas.

16.- "Lo que se ve no ha sido hecho de las cosas que aparecen". Hay una invisible substancia pensante, sobre la cual actu?a la mente, haciendo las cosas a trave?s de la operacio?n de una ley que au?n no ha sido completamente entendida por el hombre. Todo pensamiento se mueve sobre esta invisible substancia, en un grado que aumenta o disminuye. Cuando alabamos la riqueza y opulencia de nuestro Dios, esta substancia pensante se aumenta tremendamente en nuestra atmo?sfera mental; se refleja en todo lo que tocan nuestras mentes o nuestras manos. Cuando las cosas comunes se impregnan con nuestra conciencia de la substancia divina, ellas se transforman de acuerdo a nuestros ideales. A trave?s de la persistente aplicacio?n de la facultad de Juda?, un negocio fracasado puede alabarse, y convertirse en uno exitoso. Aun las cosas inanimadas parecen entender las palabras de alabanza, pues responden de manera ordenada y obediente cuando, antes, pareci?an ingobernables. Una mujer uso? la ley en su ma?quina de coser, la cual habi?a estado afirmando que estaba en malas condiciones. Despue?s de alabarla, no le causo? ma?s problemas. Un operador de linotipo recibio? cierto tratamiento espiritual que le dio' un sanador a cierta hora, y su linotipo, que habi?a estado funcionando mal, inmediatamente comenzo? a funcionar armoniosamente. Una mujer que vivi?a en un pueblo, teni?a una vieja alfombra sobre el piso de la sala; por an?os habi?a esperado reemplazarla por una mejor. Ella oyo? hablar de la ley y comenzo? a alabar la vieja alfombra. Para gran sorpresa suya, en dos semanas recibio? una alfombra nueva que proveni?a de una fuente inesperada. Estas son unas pocas ilustraciones simples de las posibilidades latentes en la alabanza. El que los cambios fueran en las cosas inanimadas o en los individuos que bregaban con ellas, no hace al caso, en tanto en cuanto se logre el fin deseado.

17.- Dirige el poder de la alabanza hacia cualquier cosa que desees aumentar. Da gracias porque ahora se esta? realizando tu idea. La ley fiel, fielmente observada, te recompensara?. Puedes alabarte a ti mismo y de la debilidad pasar a la fortaleza, de la ignorancia a la inteligencia, de la pobreza a la abundancia, de la enfermedad a la salud. El muchachito con los panes y los peces suministro? la semilla que, a trave?s de la oracio?n y la accio?n de gracias de Jesu?s, se aumento? lo suficiente como para dar de comer a cinco mil personas.

18.- Si no recibimos respuestas a nuestras oraciones es porque no hemos cumplido con.la ley completamente. "Tu? pides y no recibes, porque pides incorrectamente." Esto no quiere decir que pedimos al Sen?or cosas que no necesitamos; significa que hemos perdido lo importante en el me?todo de pedir, que nuestra relacio?n con la Mente Divina no esta? en armoni?a con la ley; el fracaso no esta? en Dios, sino en nosotros. Por tanto nunca debemos descorazonarnos sino que, como Elias orando por lluvia, debemos p erseverar hasta que nuestras oraciones sean contestadas.

19.- Todas las causas que producen resultados permanentes se originan en el Espi?ritu. La espiritualidad, la fe y el amor son facultades dadas por Dios, y cuando somos levantados en conciencia a su plano, ellas actu?an naturalmente bajo una ley espiritual que tal vez no comprendamos. Hay una ley de la oracio?n, que el hombre reconocera? y aplicara? eventualmente, como ahora reconoce y aplica las leyes de las matema?ticas y de la mu?sica.

20.- Jesu?s dijo: "Todo lo que pidiereis en mi nombre, yo lo hare?". Pedimos en Su nombre cuando oramos en la conciencia del Espi?ritu universal de Jesu?s. El logro? la unidad con la Mente Divina, y se dio cuenta de que Sus pensamientos y Sus palabras no proveni?an de El, sino de Dios. Cuando oramos en Su nombre, entramos en Su unidad con el Padre, y alcanzamos la misma conciencia que El alcanzo?.

21.- Dios es la Mente moradora, siempre presente. Para comprender a Dios, debemos aquietar nuestros pensamientos externos y entrar en la quietud, la paz, y la armoni?a del Espi?ritu. "Cuando ores, entra en tu aposento interior, y cerrando la puerta (la conciencia externa), ora a tu Padre que esta? en secreto, y tu Padre que ve en secreto, te recompensara?. Si hacemos la conexio?n apropiada con la Mente Divina en el reino de Dios dentro de nosotros, el Padre contestara? nuestras oraciones con seguridad. El no nos niega ningu?n bien si cumplimos con la ley de pedir correctamente. "Aquie?tate y sabe que yo soy Dios".

PALABRAS VIVIENTES PARA AVIVAR LA ESPIRITUALIDAD

(Para usarse con la leccio?n se?ptima)

  1. "El espi?ritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha".
  2. "La letra mata, mas el espi?ritu vivifica".
  3. "Las palabras que os he hablado son espi?ritu y vida".
  4. "Os es necesario nacer de nuevo".
  5. "Yo soy la luz del mundo". "Vosotros sois la luz del mundo".
  6. "Que vuestra luz brille delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras y glorifiquen a vuestro Padre que esta? en los cielos.
  7. "Yo soy la luz" que "alumbra a todo hombre que viene a este mundo".
  8. El Espi?ritu ilumina mi comprensio?n. Yo soy la luz de mi conciencia.
  9. Reconozco a Dios en todo momento como la u?nica fuente de mi comprensio?n.
  10. "Leva?ntate, resplandece; porque ha venido tu luz, y la gloria de Jehova? ha nacido sobre ti".
  11. La gloria del Sen?or se levanta sobre mi?, y camino en la luz de la vida.
  12. Mi cuerpo es el templo del Dios viviente, y la gloria del Sen?or llena el templo.
  13. Cristo dentro de mi? es mi gloria. El brillo de Su presencia expulsa la obscuridad del error, y todo mi cuerpo se llena de luz.
  14. "El que ama a su hermano permanece en la luz, y en e?l no hay tropiezo".
  15. "Jehova? es mi luz y mi salvacio?n; ¿de quie?n temere?? Jehova? es la fortaleza de mi vida; ¿de quie?n he de atemorizarme?..
  16. "Entonces nacera? tu luz como el alba, y tu salvacio?n se dejara? ver pronto".

ESTABLECIENDO LA SUBSTANCIA PERFECTA

(Para usarse con la leccio?n se?ptima)

  1. "Y creo? Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creo?; varo?n y hembra los creo?".
  2. Mi perfeccio?n se establece ahora en la Mente Divina.
  3. "Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que esta? en los cielos es perfecto".
  4. Al ver la perfeccio?n en todas las cosas, ayudo a que e?sta se manifieste. "Debo estar en casa de mi Padre".
  5. La carne corruptible se vuelve incorruptible, cuando se ve perfecta y pura en Cristo.
  6. Veo en mi mente el perfecto cara?cter que deseo ser, y asi? planto el pensamiento-semilla que traera? a manifestacio?n el hombre perfecto.
  7. "Nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Sen?or, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen como por el Espi?ritu del Sen?or".
  8. "Cuando Cristo, vuestra vida, se manifieste, entonces vosotros tambie?n sere?is manifestados con e?l en gloria".
  9. Mi mente se abre de nuevo al esplendor del reino de Dios, y una abundancia de rica substancia se derrama ahora sobre mis asuntos.