LECCIO?N V
1.- Cada pensamiento de la mente es una identidad que tiene un ego central. Con esto queremos decir, que todo pensamiento tiene un centro alrededor del cual todos sus elementos giran, y al cual obedecen, cuando ningu?n otro poder es evidente. Los pensamientos creen que son capaces de expresarse. El hombre piensa, y piensa en sus pensamientos todo lo que e?l es; por tanto, los pensamientos del hombre esta?n dotados con un poder de pensamiento secundario.
2.- Sin embargo, hay una diferencia entre el pensamiento original y el pensamiento secundario. Uno tiene el centro vivificante en el Espi?ritu; el otro, en el pensamiento. Uno es Hijo de Dios; el otro, es hijo del hombre.
3.- El hecho esencial que debemos comprender es que no puede haber manifestacio?n sin una inteligencia como factor fundamental o elemento constitutivo. Toda forma en el universo, toda funcio?n, toda accio?n, toda substancia, tiene una parte pensante que esta? receptiva al hombre y que puede ser controlada por e?l. La ciencia material ha observado que toda mole?cula tiene tres cosas: inteligencia, substancia y accio?n. Ella sabe a do?nde desea ir, tiene forma, y se mueve.
4.- Este principio inteligente, presente en todas las cosas, es la clave del trabajo del metafi?sico. El no se preocupa por la accio?n o reaccio?n qui?mica de la materia, ni necesita saber todas las intrincadas leyes de la electricidad o el magnetismo para obtener los mayores beneficios de ellos. Se puede pensar en ellas debido al factor inteligente presente en su estructura. Es a trave?s de esta inteligencia que todo lo penetra, que el hombre puede ejercer su ma?s alto dominio. La declaracio?n bi?blica acerca del poder y dominio del hombre sobre todas las cosas, so?lo es verdadera, cuando ese poder y dominio se estiman mental y espiritualmente.
5.- Todos los filo?sofos han afirmado que todo esta? en estado de construccio?n o destruccio?n. Estos dos estados lo penetran todo, y son aparentemente esenciales en la edificacio?n del universo. El metafi?sico percibe que la causa de estos dos movimientos son el "si?" y el "no" de la mente. Este doble atributo de la mente es evidente dondequiera, pero no es comprendido por aque?llos que so?lo observan la forma, en vez del Espi?ritu. Los polos positivo y negativo del ima?n son estados mentales de afirmacio?n y negacio?n. En los a?cidos y los a?lcalis, en lo agrio y lo dulce, la qui?mica esta? proclamando "si?" y "no". El di?a y la noche, el calor y el fri?o, la luz del sol y la sombra, la inteligencia y la ignorancia, el bien y el mal, el santo y el pecador: todos son reflejo de afirmaciones y negaciones mentales. El factor constructivo o destructivo en toda manifestacio?n, es "si?" y "no".
6.- Se ha encontrado que, a trave?s del uso de esas fuerzas mentales, el hombre puede disolver cosas, negando su existencia, y puede construirlas, afirmando su presencia. Es e?sta una aseveracio?n simple, pero cuando se aplica a todas las intrincadas formas de pensamiento del universo, se vuelve complicada. La ley de afirmacio?n y negacio?n mental, probara? su propia verdad a todos aque?llos que persistentemente hacen uso de ella.
7.- El poder de la mente para construir o destruir, se ejemplifica de manera sorprendente en el cuerpo humano. Cualquier cosa que afirmemos como verdadera con relacio?n a nosotros, se manifestara? en alguna parte en el momento oportuno. Cualquier cosa que neguemos, desaparece tan pronto la ley haya tenido tiempo de trabajar.
8.- El cuerpo esta? compuesto de ce?lulas; algunas en estado radiante, otras en formas cristalizadas. La cristalizacio?n de esas formas radiantes de pensamiento, son el resultado de las afirmaciones en la mente del hombre, de que su cuerpo es material en vez de espiritual. El estado afirmativo de la mente es un proceso de unio?n y vinculacio?n; comprende todos los pensamientos y manifestaciones del pensamiento que esta?n a su alcance. Si el hombre afirma su unio?n con la vida, la substancia y la inteligencia de Dios, e?l se apropia de estas cualidades espirituales; si e?l afirma la realidad de la materia y del cuerpo fi?sico, forma un cuadro material que trae como resultado la carne.
9.- Las afirmaciones no tienen que ser hechas en te?rminos especi?ficos, tales como "afirmo que mi cuerpo es espiritual"; la tendencia general de la mente, la suma total del pensamiento en todos sus aspectos, agrega las afirmaciones que establecen y cristalizan los pensamientos en formas. El deseo y el anhelo universal de todos los hombres y mujeres por posesiones materiales, es una afirmacio?n forti?sima que afecta tanto a la mente como al cuerpo, de manera notable. Los problemas estomacales y la constipacio?n, parecen ser males comunes a aque?llos que codician bienes financieros.
El estado mental de tensio?n que estas afirmaciones provocan, se extiende a trave?s del cuerpo. Todos los mu?sculos, nervios y o?rganos se ponen ri?gidos y casi inmo?viles. Esto quedo? perfectamente ilustrado con un banquero que era tan codicioso que su mano derecha se cerro? tan ri?gidamente, que no podi?a abrirla. Asimismo, una ambicio?n prefijada y un intenso deseo de sobresalir en algu?n campo de trabajo que uno haya seleccionado, producira?n resultados semejantes. Una voluntad dominante que se fije en cualquier direccio?n, es una forma de afirmar y afecta la accio?n vital del organismo corporal, de acuerdo con su intensidad. La congestio?n, la inflexibilidad, la rigidez, pueden tener su origen en una excesiva afirmacio?n.
10.- El remedio metafi?sico para este estado egoi?sta de la mente, es la negacio?n. Jesu?s dijo que el hombre debe "negarse a si? mismo ... y seguirme". El "me" a que aqui? se hace referencia es el ser elevado, el Cristo, "si? mismo" es la personalidad. Negacio?n es el apartar el error mental y entrar en la relajacio?n consciente de mente y cuerpo. El sanador no le dice al paciente que la constipacio?n ha sido causada por estados mentales codiciosos y mezquinos. En su lugar, mentalmente niega esos ha?bitos y mantiene a? paciente abierto y receptivo a la admirable y generosa Mente del universo. La gente no se da cuenta de que manera esta? atada por su egoi?smo, pero no es aconsejable deci?rselo abiertamente, hasta que no comprenda la diferencia entre su ser real v. su personalidad mortal.
11.- Cuando la fase " n o " de la mente es demasiado evidente, toda la conciencia esta? relajada. Esta excesiva negacio?n hace al pensamiento indefinido y vacilante, y al cuerpo de?bil y fla?cido. Prolapsos, hidropesi?a y ciertos males del rin?on, casi todas las relajaciones de las funciones del cuerpo, son el resultado del estado mental "No puedo". Por ejemplo, si un hombre de negocios que por an?os ha estado entregado a hacer dinero, se enfrenta a una gran pe?rdida y la llora, tendra? alguna clase de problema con sus rin?ones. Creera? que ha perdido su substancia, y pensamientos vanos comenzari?an a disipar las ce?lulas sin fuerza de su cuerpo. Uno que ha-ya ambicionado enormemente cierto cargo o posicio?n, y que ha sido derrotado en su empen?o, usualmente dejara? ir el polo mental positivo, y caera? en el negativo. El resultado es debilidad corporal en alguna parte. Decimos que esas personas que han "perdido la vitalidad". Y eso es lo que han hecho: su relajamiento mental ha aflojado su asimiento sobre el organismo, y e?ste esta? en peligro de disolucio?n. Los me?dicos se maravillan de que haya tantos hombres pu?blicos con diabetes y enfermedades del corazo?n. Esto sucede porque, a trave?s de la derrota, han cai?do del e?xito al desaliento. El estado mental de fracaso, lanza al pa?nico a todo el organismo y sus funciones se debilitan en su accio?n vital. En vez del to?nico del anhelo y la esperanza, esta? la debilidad del descorazonamiento y la desesperacio?n.
12.- Hay condiciones que les sobrevienen a aque?llos que confi?an en el arma de la carne. Cuando la mente del hombre esta? fija en lo ma?s alto, nunca se rinde ni permite que el fracaso frustre sus honestas ambiciones. Su pensamiento no esta? colocado en el logro egoi?sta, en consecuencia, no desarrolla un vaci?o mental si se enfrenta con una pe?rdida. No hay pe?rdida para el que posee comprensio?n espiritual. Las idas y venidas de las cosas materiales e intelectuales, no son sino cambios en el panorama de la vida. Los cambios esta?n teniendo lugar continuamente, y asi? continuara?n mientras vivamos en la conciencia dual, en el estado de existencia de "si?" y "no?", que es la mortalidad.
13.- El objetivo de la existencia del hombre, es demostrar la Verdad del Ser. Esta demostracio?n tiene lugar a trave?s de la experiencia, aunque hay dos maneras de obtener experiencia. La primera es a trave?s del conocimiento de la ley de cada proceso, y la segunda es el probar el proceso ciegamente, sin comprender la ley.
14.- La raza humana tomo? una decisio?n cuando se llego? a cierta etapa de prudencia. Una ilustracio?n de esta aseveracio?n, es la alegori?a del Jardi?n del Ede?n. Ada?n representa al hombre gene?rico. En sus primeras etapas e?l se encontraba bajo la ley del conocimiento divino: el Sen?or Dios era su gui?a e instructor; e?l no cometi?a errores, sino que vivi?a conscientemente lleno de comprensio?n divina.
15.- Toda experiencia desarrolla una identidad personal: la conciencia de los poderes del Ser en el ser. Asi? se pone de manifiesto el libre albedri?o, que es inherente a todos. En el curso de sus demostraciones del Ser, el hombre llega al lugar donde siente su propia habilidad, y sabe que puede ejercitarla sin restricciones. "Satana?s" es la mente personal que tienta al hombre para que trate de experimentar, sin tener el conocimiento. Cuando el hombre esta? divinamente iluminado, no entra conscientemente en la condicio?n dual tipificada por "el a?rbol de la ciencia del bien y del mal". Dios es todo; el mal es aquello que puede sobrevenir, si el hombre abandona su luz orientadora. En la serena mente de Dios no hay dualidad, no hay "bueno y malo", ni "inteligencia e ignorancia". La brillantez de la omnisciente Mente, disuelve todas las sombras, todas las negaciones.
16.- Es un privilegio del hombre el morar en la luz, el saber co?mo resolver el problema de la existencia tan exactamente como un matema?tico que sigue, sin desviarse, las reglas de su ciencia. El Sen?or advierte al Ada?n que se desarrolla que no "coma", que no incorpore en su conciencia el conocimiento de la dualidad, el bien y el mal. Pero, como el nin?o que rehusa tomar el consejo de los que saben, el hombre cae en la complacencia del sentido del placer y del exceso. La reaccio?n a la complacencia de los sentidos, es el dolor. A trave?s de estas experiencias, el hombre llega a un estado de conciencia opuesto al bien. La mentalidad dual establece naturalmente unas fuerzas positivas y negativas en su mente, y estas fuerzas opuestas se reflejan en el cuerpo. La conmocio?n es tan grande, que se fuerza al alma a salir de su templo: el hombre es arrojado del jardi?n, y con el correr del tiempo, olvida su anterior estado ede?nico.
17.- Algunos metafi?sicos afirman que el comer la fruta del a?rbol de la ciencia, fue una etapa necesaria en la evolucio?n del hombre; que a trave?s de la experiencia aprendemos toda la verdad, y que sin la experiencia, siempre permaneceri?amos como infantes. He aqui? la diferencia entre el cristiano pra?ctico y los otros hombres: el primero busca la orientadora luz del Espi?ritu en todos sus caminos, mientras que el otro ignora esa luz y determina su cara?cter como hizo Ada?n, con el sudor de su frente. A nuestra vida llegan experiencias amargas, porque no sabemos la ley del pensamiento armonioso. Si pensamos que el mal existe en el mundo como un poder, y que trabaja en nuestras vidas y en las vidas de los que nos rodean, lo estamos haciendo una fuerza activa, y va a resultar tal y como lo pensamos. El poeta tiene razo?n al decir que "no hay bien ni mal, sino que es el pensamiento el que lo hace".
18.- Algunos metafi?sicos sostienen que no es aconsejable hacer negaciones; que las afirmaciones incluyen todos los movimientos mentales necesarios para el perfecto desarrollo del hombre. Esta posicio?n seri?a defendible si hubie?ramos edificado nuestra conciencia de acuerdo a la ley divina. El estudiante que ha resuelto su problema matema?tico sin cometer ningu?n error, no encuentra necesario borrar. Pero si se da cuenta que ha hecho un ca?lculo erro?neo, ¿que? pasa? So?lo una borradura, seguida del ca?lculo adecuado, traera? la respuesta correcta. A todos nosotros nos han faltado ideales divinos; debemos tachar nuestros errores e insertar la Verdad, hasta que nuestro cara?cter se eleve hasta la norma de Jesucristo.
19.- El arrepentimiento es una forma de negacio?n. El perdo?n del pecado equivale a borrar el pensamiento mortal de la conciencia. El gozo que embarga al cristiano que se convierte, es el resultado de la entrada del amor divino, lo que ocurre despue?s que la mente se ha limpiado a trave?s de la negacio?n del pecado. Es e?sta una experiencia real que puede repetirse una y otra vez por aque?l que entiende la ley del bautismo del Espi?ritu Santo, hasta que todo el hombre se santifique y se libre del pecado. Los cristianos creen que la gozosa exaltacio?n que marca su conversio?n, es una sen?al especial del Sen?or, en reconocimiento del cambio en su corazo?n. Consideran que es una experiencia que so?lo se tiene una vez en la vida. Pero los metafi?sicos que han estudiado las leyes de la mente, que han practicado las negaciones y afirmaciones como una ciencia, saben que pueden llegar a un estado de e?xtasis a voluntad.
20.- El ser personal es el ego alrededor del cual giran todos los pensamientos que nos atan al error. No podemos tacharlos todos a la vez, pero poco a poco podemos arrojar los pensamientos especi?ficos que se han acumulado y edificado el estado de conciencia que se conoce como Judas. Judas representa el ego falso que ha engendrado el pensamiento erro?neo. Este "hijo de la perdicio?n" esta? tan entretejido en la conciencia, que liquidarlo de una vez destruiri?a la entidad mental, por lo que debe ser contado como uno de los doce, aun cuando sepamos que e?l "tiene un demonio".
21.- En la simbologi?a de la vida de Jesu?s, Judas se representaba como el tesorero; e?l "teni?a la bolsa". Esto quiere decir que este ego tiene posesio?n del centro sexual (la vida) en el organismo, y que lo esta? usando para sus propios fines egoi?stas. Judas era un "ladro?n". El uso egoi?sta de la vida y la vitalidad del organismo para la satisfaccio?n de los placeres de los sentidos, despoja de la naturaleza ma?s elevada, e impide la edificacio?n del hombre espiritual. Esto es traicionar a Cristo, y esta? teniendo lugar continuamente en aque?llos que viven para fines carnales y egoi?stas.
22.- Sin embargo, llega el tiempo en que Judas debe ser eliminado de la conciencia. La agoni?a de la mente y la crucifixio?n final de Jesu?s, representan el borrar completamente el falso ego, Judas.
"Yo muero diariamente", dijo Pablo. El "yo" que muere diariamente, es la conciencia personal, formada por el temor, la ignorancia, la enfermedad, la codicia de posesiones materiales, el orgullo, la ira y la legio?n de demonios que se aglomeran alrededor del ego personal. El u?nico Salvador de e?sta es Cristo, el ego espiritual, la superconciencia. No podemos resolver el gran problema de la auto-purificacio?n con nuestra propia fuerza, pero entrenga?ndonos a Cristo completamente, y negando constantemente las demandas del ser personal, vamos acrecentando nuestra imagen divina. Es e?ste el proceso por medio del cual "despertamos contemplando tu forma".
AFIRMACIONES DE LIMPIEZA Y PURIFICACIO?N
(Para usarse con la leccio?n quinta)
- Dios es bondad y Dios es todo; por tanto, rehuso creer en la realidad del mal en cualquiera de sus formas.
- Dios es vida y Dios es todo; por tanto, rehuso creer en la realidad de la pe?rdida de la vida o la muerte.
- Dios es poder y fortaleza, y Dios es todo; por tanto, rehuso creer en la ineficacia y la debilidad.
- Yo tengo autoridad. Yo le digo a este pensamiento: "Ve", y e?l va; y al otro "Ven" y e?l viene. (Leer Mat. 8:5-13).
- Yo tengo autoridad. Yo le digo a este pensamiento: " 'Ve', y e?l va; y al otro 'Ven' y e?l viene". (Leer Mat. 8:5-13).
- Dios es sabiduri?a y Dios es todo; por tanto, rehuso creer en la ignorancia.
- Dios es substancia espiritual, y Dios es todo; por tanto, no hay realidad en la limitacio?n de la materia.
- Dios es fuente inextinguible, y Dios es todo; por tanto, rehuso creer en la realidad de carencia o pobreza.
- Dios es amor, y Dios es todo; por tanto, rehuso creer en odio o venganza.
- "Aque?l que es lento en la ira es mejor que el poderoso; y aque?l que rige su espi?ritu, mejor que aque?l que ha tomado una ciudad".
